Viernes Retro: Ninja Gaiden

Recientemente, tras encontrar algunos videos del Angry Videogame Nerd en You Tube donde el vlogger James Rolfie se dedica a reseñar videojuegos de antaño, me entró la nostalgia por la clásica serie Ninja Gaiden, para el Nintendo Entertainment System (NES). Muchos jugadores recordarán este juego, ya sea que lo hayan rentado o poseído. Y muchos recordarán también las úlceras gástricas que nos provocó tratar de acabarlo.

Ninja Gaiden (Ninja Ryukenden en Japón) fue un videojuego producido por la empresa Tecmo y lanzado en el sistema NES en diciembre de 1988 (Japón) y marzo de 1989 (E.U.), a raíz del éxito que tuvo una primera versión para arcadias, lanzada en 1988. Sin embargo la versión para esta consola casera sobrepasó el éxito de su predecesora y se convirtió en uno de los juegos más populares en toda la historia y catálogo del NES. En Ninja Gaiden, un joven ninja llamado Ryu Hayabusa recibe una carta de su padre desaparecido, junto con su espada y las instrucciones para llevar a cabo una misión que pondrá el destino del mundo en juego.

Con una dinámica de juego y una historia diferentes a las de su predecesor de arcadia, Ninja Gaiden se convirtió en un éxito gracias a su dinámico estilo, excelentes gráficos, música increíble y especialmente por ser el primer juego para sistemas caseros que presentaba el desarrollo de su historia a través de cortes cinemáticos.

Una sesión completa del juego, para que vean que acabarlo es, técnicamente, posible...

Luego está el tema de su dificultad. La trilogía Ninja Gaiden para NES en general tiene altos niveles de dificultad, pero el primer juego es uno de los más difíciles que acabar en toda la historia de este sistema y posiblemente de los videojuegos en general. Para poder conquistarlo, los jugadores tenían que ejecutar sus movimientos con una precisión casi milimétrica, además de aprender a reconocer y activar algunos glitches (errores) en la programación para eliminar a ciertos enemigos. El nivel 6-2, poco antes de llegar al enfrentamiento final, es particularmente difícil y pocos jugadores han logrado pasar de ahí.

El soundtrack de este juego es uno de los mejores que existen para el NES. 

Sé que no es imposible acabarlo, yo me aprecio de haberlo hecho un par de veces, pero no tengo muchas ganas de intentarlo nuevamente... Bueno, tal vez si alguien me presta el cartucho... Y un NES que funcione... Y muchas, muchas anfetaminas...